Los bonos en dólares de Venezuela tuvieron su peor mes desde principios de 2015 en tanto el presidente Nicolás Maduro siguió con su plan de elegir una asamblea constituyente en una polémica medida que finalmente desencadenó la aplicación de sanciones contra él y miembros de su gabinete por parte de Estados Unidos.
El país deberá enfrentar alrededor de US$4.600 millones en pagos de capital e intereses durante el resto del año.
Los más de US$4.000 millones en bonos de referencia del país que vencen en 2027 cayeron un 16,7 % en julio a 41,6 centavos por dólar, mientras que los US$3.000 millones en títulos que vencen en 2035 de la petrolera estatal PDVSA descendieron 17,9 % a 37,5 centavos por dólar.
Maduro, quien ha enfrentado cuatro meses de violentas protestas que han dejado más de 110 muertos, no ha mostrado signos de una postura más conciliadora hacia la alianza opositora, en tanto sus líderes emblemáticos Leopoldo López y Antonio Ledezma fueron llevados de regreso a la cárcel tras permanecer bajo arresto domiciliario, sólo 24 horas después de que el gobierno finalizó una elección para elegir a los delegados de una llamada asamblea constituyente encargada de redactar una nueva constitución.
Si bien EE.UU. hasta ahora no ha impuesto sanciones económicas más amplias que afectarían las exportaciones de petróleo a EE.UU., las sanciones individuales aplicadas a Maduro y los miembros del gabinete han sido suficientes para preocupar a los inversionistas en deuda venezolana. Las reservas internacionales del país se mantuvieron cerca de un mínimo de 15 años durante la mayor parte del mes, a pesar de que los precios del petróleo subieron.
El país enfrenta alrededor de US$4.600 millones en pagos de capital e intereses durante el resto del año. De ese monto, US$1.600 millonesvencen en octubre y otros US$1.900 millones en noviembre.
Referencia El Espectador