Con la intención de poner un voto de censura al gobierno actual español, la formación izquierdista Podemos presentó ante el Parlamento una la moción de censura, al mismo tiempo que los diputados del Partido Socialista Obrero Español buscaban crear una mayoría alternativa al gobierno conservador sin embargo no apoyaron dicha moción.
Solo el 23% (82 votos) del congreso votaron a favor de la moción, de los cuales 71 son los diputados de Podemos y 11 de los independentistas catalanes de ERC y los vascos de Bildu. En contra resulto un 49 % (170 votos) que en su mayoría es conformado por el Partido Popular ya que cuenta con 137 legisladores en el congreso además de recibir apoyo del partido centrista Ciudadanos con 32 votos y el voto de un regionalista canario.
A pesar de estar buscando una mayoría en contra del conservacionismo, los representantes del Partido Socialista Obrero Español se abstuvieron de presentar una posición ante la discusión. Al no ver con antelación el proyecto y al notar su falta de liderazgo los socialistas decidieron privar el voto de los 85 legisladores de su partido; a ellos se les une los 13 diputados nacionalistas de centro-derecha catalanes y vascos, lo que da en total un 28% (97 votos). A pesar del fracaso, el líder de Podemos y candidato presidencial Pablo Iglesias ofreció a los socialistas buscar acuerdo y entendimiento para construir una mayoría alternativa, un acuerdo que no lograron en 2016, lo que permitió a Mariano Rajoy ser investido de nuevo presidente.