Aún no hace ni un mes que Manchester vivió uno de los peores atentados terroristas de su historia. Tras el concierto de Ariana Grande, 22 personas inocentes murieron tras la explosión del cinturón bomba que llevaba un terrorista del ISIS.
Fue un duro momento para las víctimas, para Ariana y para el mundo occidental, que de nuevo veía como se atacaba a los más inocentes en el entorno más supuestamente seguro posible.
Ariana reaccionó de la mejor manera posible: mandó toda la ayuda posible a las víctimas y organizó un macroconcierto en el que reunió a amigos y estrellas del pop para decir: aquí seguimos, no dejaremos de bailar.
Y la ciudad de Manchester se lo ha agradecido concediéndole la ciudadanía honorífica por su contribución a la ciudad con el concierto One Love Manchester. La ciudad reconoce que Ariana ha dado un gran ejemplo con su respuesta y todos deberíamos actuar así. De hecho, hace ya más de una semana que Grande retomó su ‘Dangerous Woman Tour‘ que esta misma semana recaló en Barcelona, bajo grandes medidas de seguridad.
Ariana tendrá que vivir toda la vida con el recuerdo de un suceso tan terrible, pero a la vez ha conseguido unir a todos en una lucha común.