Las largas jornadas laborales pueden ser perjudiciales para la salud porque aumentan el riesgo de sufrir un Accidente Cerebro Vascular (ACV), especialmente si esta situación se prolonga durante 10 años o más y si el sujeto es menor de 50 años.
Publicado en la revista Stroke, el estudio evaluó una cohorte de más de 140.000 personas de diferentes edades y sexos, y mediante cuestionarios auto informados se valoró la relación entre las horas de trabajo y la probabilidad de ictus o Accidente Cerebro Vascular, considerando además la ocupación y el hábito de fumar.
Se definió como “largas horas de trabajo” a las jornadas laborales que superaban las 10 horas diarias, por lo menos 50 días al año, de tiempo de trabajo. Los resultados muestran que una gran proporción, cerca de 40%, de quienes desarrollaron un ictus presentaban largas horas de trabajo y que trabajar más de las horas ya mencionadas diariamente, se vincula fuertemente con el ACV.
De forma estimada, trabajar tantas o más horas al día podría incrementar en un 45% el riesgo de sufrir un ictus según este estudio que demuestra asociación y no causalidad, sin embargo, arroja resultados sorprendentes en una gran cohorte de personas.
Por todo esto es necesario no sólo cuidar los hábitos en casa en cuanto a dieta, ejercicio y descanso sino también, en el trabajo, limitar sobre todo el estrés en el mismo y el tiempo que le dedicamos, basta con reducir las horas laborales a ocho, manteniendo el ello no algo monótono sino activo, de manera que el cuerpo pueda mantener cierta movilidad.
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Referencia: Noticias 24.