“No es cierto que el tema de Venezuela haya sido la razón del viaje”. Así la canciller María Ángela Holguín desde Cuba negó la hipótesis planteada por el diario Financial Times, que aseguró que Santos fue a La Habana para conseguir que allí se apoye “una estrategia diplomática regional para frenar la creciente crisis de Venezuela”.
Así, Holguín dio por zanjada la discusión que generó el artículo del diario británico. También dijo que desde “hace meses” se estaba organizando este viaje. “Lo que queríamos era poderle ayudar a esos empresarios que están interesados, que vienen exportando a Cuba desde hace bastante tiempo, y otros que quieren entrar a un mercado que cada vez es más grande”, añadió.
La canciller también precisó que es seguro que Santos y Castro se refieran al tema de Venezuela en su encuentro,fijado para el mediodía. Pero explicó que sería así, porque “difícilmente hoy en día se encuentran dos presidentes de la región y no se habla de Venezuela, eso ya es parte de la importancia y la preocupación que tiene todo el continente sobre el tema venezolano, no es un secreto para absolutamente nadie”.
Además, reiteró que el viaje de Santos es para “estrechar las relaciones comerciales con Cuba”. Por eso, el primer compromiso del mandatario colombiano en el país del Caribe fue la instalación de una rueda de negocios “para identificar las oportunidades comerciales y de servicios que se pueden aprovechar para aumentar el intercambio de ambas naciones”.
“Estamos interesados en abrir nuestra integración al resto de América Latina y al mundo”, aseguró Santos en este evento. Allí estuvo acompañado por un grupo de empresarios, con quienes espera discutir en Cuba sobre temas de comercio, inversión y negocios. “Este es el momento ideal para aprovechar esas buenas relaciones que tenemos Cuba y Colombia”, afirmó.
Santos también habló de la importancia del turismo para las relaciones entre ambos países. Mencionó la posibilidad de que Cuba y Colombia hagan parte de un mismo paquete para turistas europeos y asiáticos que “lleguen a Cuba, bajen a Colombia y al sur del continente y ahí se devuelvan”.
Referencia El Espectador