El martes, Washington decidió nuevas sanciones contra Irán por su programa de misiles balísticos y su comportamiento «pernicioso» en Medio Oriente, sin revisar el histórico acuerdo internacional sobre el programa nuclear de Teherán.
Ésta aceptó, en el marco de este acuerdo concluido en 2015, reducir durante 10 años sus actividades nucleares sensibles a cambio de que se levanten parcial y progresivamente las sanciones internacionales.
«La república islámica de Irán respetará siempre sus compromisos internacionales», dijo Rohani en una declaración delante de sus ministros y transmitida por televisión.
Pero si Estados Unidos quiere «imponer nuevas sanciones bajo cualquier pretexto, la nación iraní responderá de manera apropiada», dijo. «No perdonaremos las violaciones de los estadounidenses», agregó.
La víspera, la diplomacia iraní amenazó con «sancionar a nuevos individuos y entidades estadounidenses que hayan actuado contra el pueblo iraní y otros pueblos musulmanes de la región».
El Parlamento iraní abrió por su parte un procedimiento para votar una ley que refuerza el programa balístico y la fuerza Qods de los Guardianes de la Revolución, para luchar contra las acciones «terroristas» y el «aventurismo» de Washington.
Rohani acusó a Estados Unidos de «ambigüedad». «Por un lado envía informes oficiales al Congreso confirmando que Irán respeta totalmente el acuerdo nuclear y por otro impone nuevas sanciones adelantando diversas justificaciones, contrarias a la lógica y al espíritu» del acuerdo.
El presidente iraní acusó a su homólogo estadounidense, Donald Trump, de romper los acuerdos internacionales sobre Cuba, Corea del Norte y el cambio climático.
Según Rohani, Estados Unidos empuja «a Irán a abandonar sus compromisos» y «se inquietan por los vínculos económicos que mejoran entre Irán, Asia y Europa».
«Estamos contentos que hasta ahora el grupo 5+1 [Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Gran Bretaña y Alemania] haya defendido con fuerza» el acuerdo nuclear, subrayó.
Referencia AFP