La joven venezolana de 21 años, llega al certamen con la mejor marca mundial del año (14,96 metros). La colombiana es segunda en ese ránking anual con 14,86 metros.
El atletismo latinoamericano afronta el Mundial de Londres (4-13 agosto) con numerosas incógnitas y bajas importantes, por lo que confiará más que nunca en su potencia habitual, Cuba, y en sus estrellas del triple salto, Caterine Ibargüen y Yulimar Rojas, las grandes favoritas de su prueba.
El duelo entre la colombiana y la venezolana ya se dio en los Juegos de Londres, con oro y plata respectivamente, y ambas parten como principales aspirantes al título en la capital británica.
Ibargüen aspira a un tercer oro mundial consecutivo, que sumaría al olímpico de Rio, aunque en esta ocasión el panorama se presenta más abierto que en años anteriores por el ciclón Yulimar.
La joven venezolana de 21 años, campeona mundial en pista cubierta en 2016, ganó a Ibargüen en la pasada reunión de Roma y llega al Mundial con la mejor marca mundial del año (14,96 metros), que consiguió en junio en Andújar (España). Ibargüen es segunda en ese ránking anual con 14,86 metros.
La colombiana sí que pudo imponerse a su teórica próxima heredera en la última cita en la que se vieran las caras, en la reunión de la Liga de Diamante en Mónaco (14,86 contra 14,83).
Ibargüen fue una de las tres medallas de oro para Latinoamérica en el anterior Mundial, hace dos años en Pekín.
Las otras fueron las de las cubanas Yarisley Silva (salto con pértiga) y Denia Caballero (lanzamiento de disco).
En el ránking de marcas del año, Yarisley Silva ocupa el 5º lugar (4,81 metros), en una clasificación que domina la griega Ekaterini Stefanidi (4,85).
Por su parte, Denia Caballero es tercera este año en el lanzamiento de disco, que hasta ahora ha sido un pulso de marcas entre la croata Sandra Perkovic, la campeona olímpica, y la cubana Yaimé Pérez. Entre esas dos se han repartido las ocho mejores marcas de 2017.
De referencia: El Espectador.
